Durante el invierno el frío irrumpe en nuestra vida casi sin avisar. Entramos a la carrera para cambiar el vestuario de nuestro armario, todo para protegernos contra las bajas temperaturas e inclemencias del tiempo. Abrigos, guantes, gorros y bufandas son nuestra barrera de protección para mantener una piel sana en invierno. Nos ayudan a conservar una temperatura corporal adecuada y mantienen a raya posibles resfriados, gripes u otras afecciones. Sin embargo, la primera barrera de protección contra el frío es la piel. ¿Cómo reacciona la dermis a las bajas temperaturas?
Sin duda el descenso de las temperaturas y un ambiente más seco, impacta directamente al estado de la piel. Estas causas pueden tener efectos adversos y provocar lesiones cutáneas tales como resecamiento, descamación, perniosis, sabañones, entre otras. Por ello, desde PRODERPHARMACARE® queremos
compartir contigo algunos consejos para proteger tu piel contra el frío y mantener la dermis sana durante el invierno.
Cuando bajan las temperaturas, la piel se contrae, lo que obstruye los poros y reduce la transpiración. Además, el frío causa la contracción de los vasos sanguíneos, lo que limita el flujo de oxígeno y nutrientes a la piel. Así mismo, el frío extremo, la nieve y el viento pueden dañar los tejidos cutáneos, especialmente en personas con piel sensible, como niños y ancianos.
Te recomendamos el siguiente artículo del National Insititue on Aging sobre el ‘Clima frío y los adultos mayores’.
Con el frío, las enfermedades que suelen empeorar con mayor frecuencia son el acné, la psoriasis y la dermatitis atópica. Así mismo, hay otros trastornos comunes derivados del frío, tales como:
1. Hidrátate diariamente. Aplica crema hidratante regenerativa varias veces al día para mantener la vitalidad de la piel.
2. Usa un jabón con pH neutro. Un buen jabón capaz de mantener equilibrado el manto ácido de la piel.
3. No a las sustancias nocivas. Evitar el contacto con productos agresivos para la piel o protégete contra ellos.
4. Ahorra agua. Evitar duchas de larga duración con agua muy caliente. Mejor si son breves y con agua templada.
5. No hagas morros. Hidrata tus labios con frecuencia para evitar grietas y heridas difíciles de curar.
6. Evita el tabaco y el alcohol. Estas dos sustancias son archienemigos de la piel, modera el consumo o evítalos.
7. Fotoprotector siempre a mano. El reflejo solar de la nieve es igual al 80% de la radicación solar que absorbe tu piel.
8. Ande yo caliente ríase la gente. Usa ropa de abrigo y transpirable, un mecanismo eficaz para proteger la dermis.
9. Ni tanto ni tan calvo. Evita cambios bruscos de temperatura y ayuda a tu cuerpo a termorregularse.
